EL TRABAJADOR SOCIAL COMO ÓRGANO DE PRUEBA EN EL PROCEDIMIENTO PENAL ACUSATORIO Y ORAL

Resumen

El presente trabajo tiene como objetivo hacer visible la importancia del Trabajo Social como disciplina cuya metodología de intervención contribuye al conocimiento y transformación de los procesos sociales. El trabajador social busca la mejora de la sociedad, visibiliza carencias sociales y necesidades de una manera objetiva e imparcial; diseña planes de intervención adecuados para mejorar la situación de colectividades y de individuos, con respeto a sus derechos humanos y actitud empática al proponer políticas públicas y programas de desarrollo sostenible. En tal sentido, los trabajadores sociales como actores de la intervención actúan en situaciones sociales reales: salud, educación, en procesos familiares de adopción, pensiones alimenticias, divorcios, alienación parental, establecer condiciones socio-económicas de personas, atención a farmacodependientes o alcoholdependientes, entre otros., de las cuales, los abogados penalistas abordan la fenomenología delincuencial y victimológica en el marco del sistema penal acusatorio y oral. Este sistema y la reforma en materia de derechos humanos, produjeron un cambio jurídico-social en la forma de procurar y administrar justicia y en el modo de ejercer la profesión jurídica y se apertura un ámbito laboral para el trabajador social. Hoy, el trabajador social se convierte en un colaborador para el litigio estratégico de alto impacto, donde su intervención ya no se circunscribe a realizar informes en trabajo social, sino asumirse como órgano de prueba cuando comparece en el proceso a desahogar un medio de prueba –la peritación en trabajo social-, la cual, terminada, se incorpora explícitamente por el sujeto procesal oferente, como prueba para su valoración por jueces o tribunales